Google

   
  RACING CLUB
  LOS ARQUEROS
 

"Yo solo no gano ni pierdo partidos"El arquero, cuestionado por la goleada con Independiente, dice que la responsabilidad recae en el grupo. Pero también asegura que "yo sé que no puedo tener errores. Te equivocás una vez y sacás del medio". 

Pablo fue titular en el arranque del pentagonal veraniego, en el partido que Independiente ganó 4-0. “El clásico ya pasó”, aseguró Migliore, acostumbrado a poner el pecho ante situaciones complicadas.
 

Sus manos, nerviosas, juegan con la tapa de su celular una y otra vez. La voz del Papu Gómez, de fondo y demasiado alta, lo distrae y lo saca de la atmósfera de paz que él mismo se forjó casi como un mecanismo de defensa. Pablo Migliore prefiere interrumpir el mano a mano con migo para volver a darle un marco de serenidad al lobby del hotel y deja en mute la entrevista con el punta de Arsenal que casi llega a la Academia. Necesita brindarse a pleno para descargarse después de los cuatro goles que sufrió frente a Independiente y explicar lo que pasa por su cabeza después del golpe más duro que sufrió desde que llegó a Racing. Porque si bien por fuera demuestra el mismo carácter fuerte e impenetrable de siempre, hay gestos que denotan que su ánimo aún tiene heridas que no cicatrizaron del todo. "Hagamos las fotos acá adentro. Perdón, pero no tengo ganas de salir a la calle. Quiero charlar tranquilo", se excusa el arquero, quien se tomó un par de días para hacer autocrítica con su almohada, digerir algunos reproches y bajarle las pulsaciones a un comienzo de año demasiado complicado para la Acadé.

-¿Todavía duele el debut frente a Independiente?

-Ya está, el clásico ya pasó. Me da un poquito de bronca que el puesto del arquero sea tan ingrato... Yo sé que no puedo tener errores y que tengo que estar lo más frío posible. Te equivocás una vez y sacás del medio.

-¿Qué fue lo que pasó?

-Quedamos desprotegidos en defensa porque pensábamos que podíamos hacer un gol. Nadie tiene la culpa puntual de quedar mal en defensa. Nos llegaron cinco veces y nos metieron cuatro. No fuimos un desastre... En nuestro interior somos conscientes de que fuimos más al frente de lo que teníamos que ir. Por eso se dio la goleada, porque el desarrollo no fue tan desfavorable.

-¿Pensás que toda la responsabilidad de los goles cayó en vos?

-Yo no me pongo a ver esas cosas. En la cancha somos 11 y yo solo no gano ni pierdo partidos, eso es claro. Somos un grupo y cada uno se tiene que hacer cargo de lo que hizo mal porque así es como vamos a empezar a crecer en lo grupal.

-¿Falta diálogo?

-Cada uno tiene el diálogo que tiene que tener. Yo creo que la comunicación nunca se cortó. Lo que sí es cierto es que no hacemos muchas reuniones grupales, quizá porque nunca pasó nada como para encararlo de esa manera. Cada uno habla sus cosas, se arrima y comenta con quien le parece. Con el DT jamás existió todo lo que se dice, nosotros tomamos las cosas con calma y ahora nos estamos adaptando al nuevo presidente.

-Pero entonces hay algo que no funciona...

-¿Por qué? A veces las cosas se hacen más grandes de lo que son. Perdimos con Independiente y se vino todo abajo; de golpe se gana un partido y pasa a ser todo color de rosas. Uno no se tiene que poner mal ni dejar que usen a Racing para decir que acá hay quilombos. La realidad es que no está todo bien cuando ganás ni todo mal cuando perdés.

-¿Es muy difícil atajar en Racing?

-Hoy es difícil jugar en todos lados. El fútbol está muy acelerado, pasa todo demasiado rápido. Hoy jugás, mañana no... Hay que estar preparado siempre.

-¿Tenés autocrítica?

-Siempre. Pero las jugadas que se dan en los partidos no son individuales, sino que son grupales. Las cosas que tengo que corregir yo las trabajo con el entrenador de arqueros, pero dentro de la cancha son cosas de grupo.

La seguridad en las palabras de Migliore es blindada, a prueba de balas. Si bien le escapa al bulto y no admite que Racing es difícil, el arquero sorteó muchos obstáculos hasta conseguir la titularidad en el arco. Se bancó que la hinchada pusiera banderas en su contra, que lo hostiguen por su fanatismo por Boca, que pidieran por otros arqueros y hasta que la dirigencia reconociera públicamente que no sería mala la incorporación de un cuarto colega. "No me generaría miedo si los dirigentes quisieran traer a otro arquero. Si viene, mejor todavía porque me va a ayudar a crecer más. La competencia es buena y ayuda a mejorar. No tengo idea si quieren que venga Mauri (Caranta), pero es un gran arquero y excelente persona. Me pone triste lo que le está pasando en Boca", asegura el uno surgido de Huracán.

-¿Y qué te genera que en el clásico la hinchada haya pedido por Martínez Gullotta?

-La gente está en su derecho. Ellos quieren lo mejor para el club y a mí me trajeron para hacer las cosas bien. Pero yo comprendo que algunas veces se puedan enojar.

-¿Te hacés más grande cuando te insultan?

-Todos piensan que yo soy un arquero al que siempre trataron mal y nada que ver. Yo no estoy acostumbrado a que me puteen, por suerte no viví así. En todos los clubes que jugué me quisieron y creo que acá en Racing también. Yo me siento querido desde el primer día que llegué, en el que pedí apoyo y lo recibí casi al instante.

-¿Sirven de algo los partidos de verano o sólo perjudican?

-A nosotros nos sirven porque nos enfrentamos a los mejores equipos del país. Esto es preparación, pero sabemos que los hinchas se ponen contentos si ganamos. No dejan de ser importantes.

-¿Y a vos te sirven?

-Mucho. Necesito ser más regular. Yo quisiera atajar siempre como lo hice en Tucumán, donde ganamos y encima atajé un penal. Pero es difícil. Soy el primero que quiere empezar a levantar mi nivel, pero al menos mi objetivo es ir de a poco y a pasos firmes.

-¿Se puede disfrutar de un partido a pesar de todas las presiones que te rodean?

-El día que no disfrute me voy a retirar. Soy feliz jugando en Racing y me divierto, eh. Yo trabajo de lo que me gusta y es un privilegio de pocos. Lo tomo con seriedad y sé lo que quiero, pero siempre disfrutando cada momento.

-¿De a poco vas perdiendo la pasión de hincha que tenías antes de jugar en Primera?

-Es complicado... Cuando lo miraba de afuera me ponía mal, me amargaba mucho y quizás ahora voy perdiendo esas cosas porque estoy del lado de adentro y veo otras que la gente no ve. Perdí algo de hincha, pero la pasión es lo único que me queda intacto.

-¿Te sentís respaldado por el técnico? Un arquero después de sufrir cuatro goles siempre quiere revancha inmediata...

-Sé que hoy puedo jugar y que tengo respaldo. Mañana no tengo ni idea, pero yo me adapto a todo... Pienso en positivo porque si no, no puedo salir adelante. Acá los tiempos te atropellan y hay partidos muy seguidos, así que me adapto rápido y no me importa esperar.

-Tus compañeros te aprecian mucho porque siempre tratas de sumar, de poner buena cara...

-Me pone contento saber que le puedo dar algo al grupo. Hay muchos jóvenes y yo trato de desdramatizar las situaciones que se vivieron en los últimos días. Hay que tomarse las cosas con más calma. Somos un buen grupo.

Todavía jugando con la tapa de su celular y mirándolo fijamente mientras confiesa sus vivencias, Pablo también piensa en el futuro del equipo. Si bien tampoco estará presente en el partido de mañana frente a River en Mendoza, el arquero ya tiene entre ceja y ceja la primera fecha del campeonato frente a Lanús. "Vamos a intentar sumar la mayor cantidad de puntos posibles. Tenemos un buen equipo y espero poder hacer un buen torneo", adelanta Migliore.

-En el último torneo se pincharon el final...

-Sí, pero ahora las cosas van a cambiar. Yo tengo mucha fe y la historia va a ser distinta, estoy convencido de eso. Nuestro objetivo es hacernos fuertes de local para ser más respetados.






Después de un año y cuatro meses, Campagnuolo volvió al arco. Caudillo y referente, estuvo sólido.

Volvió. Tenía que volver. Después de más de un año y cuatro meses sin estar en el arco titular, Gustavo Campagnuolo retornó a custodiar un puesto que hace tiempo genera polémica en Racing. Luego de los cuatro goles que sufrió ante Independiente, Pablo Migliore se corrió a un costado para que el Flaco pudiera demostrar que todavía tiene horas de vuelo para estar presente en el próximo torneo. De todas maneras, el examen contra San Lorenzo fue demasiado liviano, ya que casi no tuvo que intervenir. Igual, en pleno debate sobre quién debe ser el uno en el torneo, que un histórico como Campa haya regresado es una gran noticia para el técnico Llop.

En un plantel donde no abundan los referentes, ver a Campagnuolo con la cinta de capitán potenció su regreso. Su último partido había sido justo ante el Ciclón, el 28 de agosto del 2007, en el famoso partido que Racing ganaba por 3 a 0 y que luego terminaría perdiendo por 4-3. En ese martes maldito el arquero vio la roja y ya no volvería al arco: primero perdió el puesto con Hilardio Navarro y luego sufrió una lesión en los ligamentos de la rodilla izquierda. ¿Cómo se lo vio anoche? Tranquilo, siempre atento y ordenando sin tregua a sus defensores. La única vez que lo inquietaron un poco fue a los 10 minutos del primer tiempo, cuando Rinaldi lo probó desde lejos y él controló la pelota sin problemas. En la segunda parte, lo salvó el travesaño en dos oportunidades: en un remate del pibe Reynoso y en un despeje kamikaze de Sosa.

Ahora habrá que ver qué camino toma Llop. Si seguirá apostando a Migliore o si le dará pista al Flaco, pieza clave en el título Apertura que el club de Avellaneda logró en el 2001. Además de ese trofeo, Campa carga con unos números más que interesantes con la camiseta de Racing: jugó 157 partidos, le 187 goles, tiene un promedio Olé de 6,16 y logró irse sin goles en 51 oportunidades.

Más allá de su inactividad, Gustavo había jugado algunos partidos en la Reserva en el Apertura pasado. Por eso, la pretemporada se transformó en una cuestión de estado para el arquero: se puso como meta prepararse con todo para salir de las sombras. En un partido chato y donde casi no existieron las situaciones de peligro, Campagnuolo mostró concentración y no cometió errores. Ahora, el entrenador decidirá...




"Nunca me resigno: sé que la chance llegará"Martínez Gullotta vuelve al arco por primera vez desde que Llop lo sacó. El arquero rompe un largo silencio, reconoce que cometió errores y avisa: "Con trabajo, me voy a ganar un lugar".

"ESPERO QUE TODO ME SALGA BIEN", DICE EL MENDOCINO.
 

Esperó su momento. En silencio, desde las sombras, se olvidó del protagonismo que le conllevaba ser el arquero titular y arrancó de cero para lograr una nueva oportunidad. José Luis Martínez Gullotta le dejó el arco a Pablo Migliore luego del triunfo frente a San Lorenzo, en el campeonato pasado, y recién esta noche tendrá revancha. Renovado después de pasar varios meses sin exponerse ante los medios, Wally transformó cierta bronca por perder el puesto en energía para recuperar terreno. "Tengo ansiedad y ganas de demostrar más cosas que el año pasado. De afuera se vive muy distinto... Uno pierde un poco las ganas en el día a día, pero nunca bajé los brazos porque entendí que el grupo me necesitaba y no podía dejarme caer", asegura el mendocino, que frente a River será el único local: "Siempre es lindo volver a mi ciudad. Espero hacer las cosas bien y que después el técnico decida. Tengo ganas de estar...".

-¿En qué fallaste para perder el puesto?

-Cometí errores porque tengo pocos partidos en Primera. A medida que pase el tiempo y tenga continuidad, me voy a afianzar. Es un puesto en el que no hay que desesperarse...

-¿Fueron injustas tantas críticas?

-Duelen, pero es el trabajo de otras personas que tienen que opinar. Yo hice autocrítica y escuché mucho para intentar mejorar.

-¿Es más fácil criticar a Gullotta que a un arquero ya consagrado?

-El fútbol es así. Me voy a ganar un lugar si sigo trabajando: el día de mañana me ganaré el respeto...

-¿Hoy no lo tenés?

-Siento que de a poco me voy ganando un lugar con la gente, por la forma en que me tratan. El respeto se gana en la cancha y sumando por el equipo.

-La gente te pidió ante Independiente. ¿Es bueno o molesta porque incomoda a un compañero?

-No es bueno porque incomoda al chico que está jugando y es una sensación fea. Acá todos tienen que estar apoyados porque todos queremos lo mejor para Racing. Yo deseo que al que ataje le vaya bien.

-Volvés a atajar contra River. El último fue un 3-3 muy extraño...

-Ya pasó. Fue un lindo partido para jugar, muy emotivo y ahora me toca de nuevo. Nosotros queremos ganar, pero yo no siento que sea una revancha este partido ni toda esta situación. Quiero jugar bien y lo tomo con responsabilidad.

-¿Si atajás bien te podés adueñar del arco?

-Si me eligen, tengo que rendir al máximo. Siempre. Yo llevo ocho años en el club y no me quisiera ir nunca de Racing...

-¿Y si no jugás, igual te quedarías?

-Si pensara así, ya me hubiera ido: tuve ofertas. Pero acá estoy cómodo, no me resignaré nunca y sé que la chance va a llegar.

 
  LA PAGINA PERTENESE A OCTAVIO-ANARCAPUNK  
 
NO SE OLVIDEN LAS ENCUESTAS Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis